Lo dejé a un lado por un tiempo, pero la epidemia reciente de gris y verde obscuro me dejaron con ganas de azules, morados y verdes brillantes. Indecisa, acabé por emplear los tres colores. El resultado es una progresión del morado obscuro al verde.
Hay manchones irregulares aquí y allá, no es una progresión uniforme. Utilizé colorantes comestibles y vinagre en grandes cantidades. Todas estas botellas estaban llenas y recién salidas de sus cajas cuando empecé.
¿Qué lecciones aprendí? Que debí enhebrar los puntos en ambas orillas con otro estambre antes de teñir. Como pueden apreciar, el lienzo se destejió un poco por ambos lados. La culpa de algunos de los manchones la tienen esos hilos sueltos cuando entraron en contacto con secciones aún sin teñir (nótese que no culpo mi propia falta de previsión o de destreza). Otra lección es que hay que usar dos ollas para enjuagar y sostener el lienzo por la mitad mientras se sumerje una y otra vez en las ollas. El centro del lienzo es mejor enjuagarlo bajo el chorro de la llave. La lección final es que hay que tener todo listo antes de empezar y no preocuparse por la limpieza (or por ningún otra cosa, incluyendo el teléfono) hasta terminar el proceso, aún si el proceso requiere seis horas.
2 comentarios:
Hola, Pioggia!!!
No conocia este producto de Knit-pro. Que es? un kit para teñir un paño de punto ya teñido? luego lo destejes y usas para hacer calcetines?
Tiene muy buena pinta.
Efectivamente, es de Knit Picks. Lo llaman Sock blank y no es más que un paño tejido con dos hebras idénticas de estambre para calcetines. No incluye los tintes, pero puedes usar colorantes comestibles y vinagre, como hice yo. Como son dos hebras tejidas al mismo tiempo, obtienes dos calcetines idénticos.
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