¡Está listo! Es suficientemente largo en la espalda, pero con cobertura mínima en la barriga. Se mantiene en su sitio porque está combado hacia la grupa. Y, lo más importante, le ajusta bien alrededor del pecho. Ninguno de los suéteres que le he comprado le ha quedado tan bien. No sé por qué no se me había ocurrido antes. El cuello de tortuga fue idea de mi esposo.
Ya puedo dedicarme otra vez a mis calcetines. Decidí hacerlos largos hasta la rodilla, lo cual significa que tengo que idear cómo incrementar puntos sin arruinar el patrón.
1 comentario:
Que bien te ha quedado el sueter... y justo a tiempo para el frio.. bueno por lo menos por aqui!
La forma este perfecto.. y si, parece que le encanta..!
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