Me encanta su aroma, y el hecho de que mi esposo me siga trayendo flores vivas con la esperanza de que algún día yo aprenda a no matarlas. Déjenme mostrar ahora mis estambres de algodón y alpaca que conseguí en la Ciudad de México:
Creo que haré más compras cada vez que vaya a casa. ¿Pueden creer que conseguí una aguja circular de 4.5 mm con un cable de 80 cm por cerca de cuatro dólares en un supermercado? Así fue, un supermercado común y corriente, ni siquiera estab a yo en el centro donde se supone que todo es más barato. La estoy empleando para el kiri, aunque un cable más largo me habría venido mejor:
Y aquí están algunas agujas y herramientas de mi abuela que traje conmigo:
Por último, pensaba empezar a componer la blusa calada, pero en vez de ello empecé un calcetín:
6 comentarios:
No le cojas miedo a la cámara, las cosas cuando se usan se rompen, fué mala suerte :) Muy bonitas tus adquisiciones y el tesoro de la abuela... buffff... seguro que te quitará de un montón de apuros.
No les cojas miedo a los objetos inanimados, no importa lo caros que sean. Estrenala, que tu lo vales :)
Menudo alijo te has traido. Es geial!!
Qué bien sienta ir a casa unos días!!! Recargas pilas hasta la próxima!! Además veo que has venido cargadísima!!
¡Qué de cosas! Tengo que enseñarle esto a mi futura costilla para que vea que no soy la única que vuelve con cientos de cosas a casa. ;)
Preciosos tus calcetines y el Kiri. :)
Oye, ya creció el Kiri! El calcetín está muy bien y todo lo que llevaste de tu abuela también, cuando de repente necesitas un seguro siempre es en sábado a las 11 pm, es muy bueno tenerlos.
que maravilloso tesoro¡¡¡¡¡¡¡
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